sábado, 5 de febrero de 2011
lunes, 17 de enero de 2011
La presentación de Paco: sencillamente genial
Mi misantropía congénita me impide conocer a gente nueva e incluso relacionarme con la que conozco, a veces. Así que me acerqué a ver la presentación de “El círculo alquímico”, pero a mi forma. Llegué en un taxi a las siete en punto de la tarde a la librería Estudio en escarlata. Creí que la presentación no había empezado porque había gente en la calle. Me tomé un café en un bar de al lado, sin poder echar un pitillo por la jodida ley. Tardé poco, pues no quería perderme nada, pero la gente seguía en la calle. En vista de que eran ya más de las siete y diez, entré, no sin antes saludar con un escueto hola a alguna gente del barrio. Me abrí paso como pude. Resulta que la cosa ya había empezado.
He estado en algunas presentaciones anteriores. Nunca vi la librería tan llena, lo cual me alegró bastante. Cuando entré, terminó de hablar el editor y comenzó a hablar Virtudes, que se iba emocionando por momentos. Tiene razón Paco cuando me dice que es la mejor poeta que conoce. Me ha ido pasando poco a poco todos sus poemas, y es para flipar. Vi que Paco le hizo una carantoña y ella, al poco, hizo una gracia y sonrió. También el público. Eso la relajó. Tiene suerte Paco de contar con ella como amiga, porque que le elogien a uno así es para flipar. Incluso leyó un poema dedicado al libro, con el mismo título, precioso. Y terminó extrayendo frases del libro que le habían gustado.
Luego habló Pedro de Paz, con su vozarrón. Como el editor y Virtudes se habían extendido un tanto, fue conciso pero certero, se lo da el oficio. Lógicamente, alabó también al autor y a la novela.
Después comenzó a hablar mi colega Paco. Dio las gracias al editor por confiar en él sin conocerle de nada. Y a Virtudes Reza y a Pedro de Paz, a los que admira como personas y como escritores. Y luego dijo que también era importante que el público supiera que había llevado Protos y Marqués de Cáceres, supongo que para soltar tensión, o lo mismo lo dijo en serio, porque este es así. Explicó que le encanta Toledo, sus calles y su catedral, y que estuvo allí tres días dedicando las mañanas a estudiar el templo y las tardes a pasear por la Judería y aledaños, en definitiva, documentándose. Habló de cómo la Ciudad Imperial albergó un día a las tres culturas y que se propuso hacer viajar a sus personajes por otras dos ciudades: una representativa del mundo judío, que no podía ser otra que Jerusalén, y otra del mundo árabe que también tuviera representación de las tres comunidades; fue así como eligió El Cairo. Habló de géneros. Y nos contó que en todo momento había escrito la novela que él quería leer. Como tardó un año en escribirla, hubo momentos en que quería leer novela de viajes, novela histórica, novela de Arte, novela negra, etc. Y que, por tanto, la novela es una fusión, aunque puntualizó que él en ningún momento había pensado en géneros ni nada parecido.
Continuó hablando de lo que para él es una novela: una historia con personajes y paisajes que tiene que tener planteamiento, nudo y desenlace; y un detonante o varios. Que no soporta esos libros que, bajo la etiqueta de “novela”, no hacen más que presentar las divagaciones o paranoias de un escritor que no tiene una historia que contar. No puedo estar más de acuerdo.
El acto duró más de una hora. Luego se sirvieron los canapés con las copas de vino y a continuación, Paco se puso a firmar. Y yo me fui por donde había venido.
Ayer me decía que tenía que, por lo menos, haberle saludado. Pero no era el momento, ese era su día, no el mío, aunque me marché tela de contento porque sabía lo que para él significaba ese día. Me contó que luego se fueron a cenar algo y a tomar unas cañas. Y no se fue con sus presentadores y el editor, como hacen otros, sino que allí se apuntó todo el que quiso. Mi colega Paco es un tipo sencillo que se lo pasa bien rodeado de amigos, sean estos importantes o no, a él eso se la pela.
Creo que ha batido el récord de la librería de ventas en una presentación. Y yo me alegro. Nadie se lo merece más que él. Y además, que es mi mejor colega desde hace mucho, mucho tiempo. Y que lleva esperando muchos años para publicar. Y que tiene otras dos novelas tan buenas o mejores que esta que espero ver pronto en los escaparates. No sé a qué coño esperan los editoresmiércoles, 12 de enero de 2011
Aviso
domingo, 9 de enero de 2011
El círculo alquímico ya está en papel
No paro de trabajar. Hay que ver la cantidad de peña que, en vez de dedicarse a trabajar, estafa, amenaza, especula, trafica, soborna, roba... Llegué a Madrid ayer, al mediodía. Esperaba ver a Paco en la bodega del Suso para tomar un vermú, pero no estaba. Le llamé a su móvil, pero no contestaba. Así que me entretuve en escuchar los desvaríos de los zumbaos del “psiquiátrico”, como el propio Suso llama a su establecimiento y luego me fui para casa. Entre los vermús y los pinchos de tortilla que me sirvió el Suso ni siquiera comí, así que me eché un rato.
Me levanté a las seis y me hice un café. Mientras me encendía un cigarrillo miré el correo electrónico y vi a Paco por el messenger. Nos saludamos y quedamos a las nueve en el Paraíso del jamón, de San Bernardo. Me di una ducha y estuve un rato tirado en el sofá leyendo la última de Edward Bunker que ha publicado la editorial Sajalín, “Perro come perro”.
Total que a las nueve y cinco vi entrar a Paco por la puerta del mesón con su novela impresa en la mano y con una sonrisa de oreja a oreja. La estuve mirando e incluso la olisqueé, ya que todavía llevaba impregnado ese olor a imprenta tan agradable y característico. Estuvimos charlando un rato acerca de la edición de la obra y de los avatares relacionados con la presentación, que será el próximo sábado 15 en la librería Estudio en escarlata. Lo cierto es que está ilusionado y un poco acojonado en el sentido de que no sabe cuánta gente acudirá al acto. De lo que no me cabe duda, por lo que me contó, es de que el público va a ser de lo más heterogéneo por la procedencia de los distintos grupos que él cree que acudirán al acto. El caso es que esté lleno y que se vendan muchas novelas, aunque él piensa que esto es lo de menos, que lo importante es pasar un rato agradable.
Nos tomamos dos bocadillos de jamón de bellota con unos Riojas y una de queso añejo. Después unos pinchos de bonito con pimiento morrón. Más tarde nos fuimos a un gallego de Leganitos que tienen una tarta de Santiago de la hostia, y la acompañamos con un Oporto. El caso es que acabamos en el barrio. Paco me llevó a un garito que regenta uno de los zumbaos del barrio y llamó a la puerta, ya que aparentemente estaba cerrado. Aquello era un templo del vicio, ya que nos tomamos unas cervezas y nos fumamos unos trujas, allí fumaba todo dios. Acabamos echándonos un mus con unos notas de San Blas que no nos conocían, y ese fue su error. Nunca se puede subestimar al contrario. Les dimos una curra que para qué.
Luego nos marchamos andando. En el portal de Paco me pillé un taxi. Parece mentira, pero por fin he tenido una novela de mi colega en las manos. Por fin ha habido un editor listo. No es la primera novela de él, concretamente es la segunda, pero da igual, lo importante es que va a publicar en estos tiempos tan difíciles. Y ni él mismo es consciente de lo que eso significa. O lo sabe..., y no le da importancia. Mi colega es así.
jueves, 23 de diciembre de 2010
Faltan días
A mediodía he vuelto a tomar un vermú con Paco en la bodega del Suso. Hemos hablado de la inminente publicación de su segunda novela, “El círculo alquímico”. Ya se saben más cosas. Le han dicho que sale de imprenta el 5 de enero y que prepare la presentación en Madrid para el 15 o así. La cosa ya está ahí, a las puertas, y yo tampoco es que le vea excesivamente contento después de lo que ha luchado por esto. Pero es que Paco tampoco es mucho de expresar. Yo sé que lo está, y yo también, porque se lo merece. El oficio de escritor, bajo mi punto de vista, es admirable. Tened en cuenta que escriben, la mayoría de las veces sin saber si la novela tendrá salida. Escribir una novela es un trabajo descomunal. Y luego las correcciones e intentar colocarla. Una locura, vamos.
Pero estos tipos parecen que son de una madera especial. Bueno, en fin, que una de las finalidades, por no decir la única, por las que hice este blog, seguir la carrera literaria de mi amigo Paco Gómez, parece que se cumple: la publicación de su primera novela “El círculo alquímico”. No olvidéis que en realidad es la segunda que ha escrito, aunque sea la primera que publican.
Seguramente la presentación en Madrid se producirá en la librería Estudio en escarlata, aunque Paco tiene que hablarlo con ellos todavía. Habrá otra en Toledo, ya que la Editorial Ledoria tiene allí su sede, ciudad propicia, ya que la novela comienza y termina precisamente en la Ciudad Imperial.
Me dice Paco que una amiga poeta de Cádiz le ha propuesto presentar también la novela allí y seguramente así será.
Por cierto, que comentaba con Paco a mediodía que hace tiempo que no vemos en lo del Suso al Miguel y al Ricky, y el nivel de las tertulias baja.
sábado, 11 de diciembre de 2010
El círculo alquímico
Ayer estuve con Paco en la bodega del Suso, en el barrio. Nos tomamos unos vermús en ese ambiente único que solo puede encontrarse en un bareto-bodega de la periferia de Madrid. La bebida es barata y el Suso trae en papel de plata una tortilla o unas croquetas caseras de casa para poner de aperitivo. Generalmente te partes el pecho de risa, porque como el propio Suso dice, su bodega es un frenopático. No en vano alberga en su barra a todos los colgaos del barrio que, con sus ocurrencias disparatadas, no hay más remedio que reírse.
Luego nos fuimos al Goterón, un bareto del barrio que es un emporio gastronómico. Os puedo decir que hacen el mejor arroz con Bogavante que he probado, y ya he corrido mundo. Curioso, porque os hablo de Canillejas, no de Alicante o de Málaga. El caso es que el encuentro con Paco no fue premeditado y solo tomamos unos aperitivos. Unas gambas de Huelva y unos montados de jabón ibérico con aceite de oliva virgen extra escoltados por dos copas de Marqués de Cáceres. Hasta nos echamos dos chupitos de hierbas caseros para rematar la velada.
Estuvimos hablando de “El círculo alquímico”, lógicamente. Paco me ha pasado la portada y la contraportada que os pongo arriba. A mí me ha gustado el diseño. Para ser una editorial pequeña se lo han currado. La novela está ahora en imprenta por lo que es más que probable que el libro esté en las librerías antes de fin de año. Otra cosas son las presentaciones, que no se sabe todavía cuándo se van a poder hacer. Como os dije, esta es la segunda novela de Paco, ya que la primera sigue secuestrada en una editorial grande. Pero es la primera que Paco va a tener en el mercado, lo que son las cosas. Y, lógicamente, está muy ilusionado, si hasta lo estoy yo de tener un colega escritor. Además, que escribe bien el jodido, a pesar de ser ingeniero y no ser de Letras. Yo, como sabéis, me he leído todas las suyas. Y como ya os he dicho en alguna ocasión, no tienen nada que envidiar a las novelas de otros novelistas conocidos. Lo que pasa es que este mundillo funciona mucho por los contactos. Y Paco, hasta ahora, es un desconocido.
Espero que a partir de ahora todo esto cambie como consecuencia de que las novelas se agoten en las librerías. Yo os prometo que no vais a salir defraudados.
domingo, 28 de noviembre de 2010
La novela de Paco Gómez se acerca
Normalmente, cuando voy a una comisaría, me miran con mala cara. Ser detective privado en España es complicado. No se puede actuar como lo hacen los americanos en las películas. Estamos bastante restringidos en cuanto a las labores que podemos hacer y si nos pasamos nos quitan el permiso. Yo tengo licencia de armas, lo que me ha sacado de más de un apuro, pero solo es porque fui policía. En la mayoría de los casos, no se conceden.
Anoche me pasé por la comisaría del barrio. Ahí todo es distinto, porque es donde presté mis años de servicio. Además está Antonio Parras, a quien conozco desde que éramos pequeños. Les serví un caso resuelto en bandeja. Después, el inspector se vino a cenar conmigo y por el camino recogimos a Paco. Nos fuimos a la freiduría el Chaval y cenamos unos bocatas de Gallinejas. Paco y Antonio hacía un huevo de tiempo que no se veían.
Al final acabamos tomando una copa en un garito de Julián Camarillo. Paco nos contó que a Pedro de Paz le han dado un premio de novela. Estaba tan contento porque le considera un buen escritor y amigo. Además nos comentó que a Carlos Salem le habían concedido el París Noir de Novela Negra en Francia. Y que le había escrito desde París para decirle que unos poemas que Paco le regaló en la presentación del poemario de Salem habían sido depositados por el poeta y su chica en la tumba de Cortázar, en el cementerio de Montparnasse. Estaba contento porque no imaginaba un final mejor para unos poemas suyos.
Paco nos contó que el editor le ha dicho que quiere sacar su novela para finales de Diciembre y que habrá presentación en Toledo y en Madrid. Está contento pero, por otra parte, con la mosca detrás de la oreja, por aquello de que hasta que no vea su libro publicado no se lo cree. Tanto Antonio como yo le tranquilizamos. No en vano ya le enviaron el libro maquetado y realizó las correcciones. El editor le dijo a principios de la semana pasada que empezaban a trabajar y que iban a diseñar la portada. Pero claro, supongo que a mí me pasaría lo mismo y más después de que su primera novela siga secuestrada en la editorial grande con la que firmó el contrato. Esta es la segunda, que será, en realidad la primera que le van a publicar, lo que son las cosas. Además estaba contento con el prólogo que le ha hecho su amiga Virtudes. Lo llevaba encima y nos lo enseñó y, la verdad, lo que pone Virtudes hace honor a la novela. Me dijo que pronto iba a colgarlo en su blog. Y yo le pedí permiso para dar en primicia el título de la novela. Ni me dijo que sí ni que no. Pero, tras despedirnos de Antonio, nos fuimos a El Nagual y nos echamos un mus contra el Chipi y el Yoni. Ganamos. Y me dijo que lo publicase si quería. La novela se llama “El círculo alquímico”. Y si la leéis vais a alucinar.